En La mano izquierda de Peter Pan de Silvia Herreros de Tejada, la protagonista está casada con Seymour Chapman, un atractivo y famoso presentador de televisión, conductor del programa Books & Looks cuyo título surge de los libros que forman la parte esencial de un atuendo.
«Mirábamos a la gente fijándonos en los libros que llevaban en la mano. Típico cool book look para pelotear a un profesor, gafas de pasta y Adiós, Mister Chips; típico cool book look de cita romántica, conjunto sexy y Cumbres borrascosas; típico cool book look para quedar bien en una entrevista de trabajo, traje oscuro y La hoguera de las vanidades».
Llevar ese libro bajo el brazo, llevar un cool book look, decía sin hablar «soy éste, soy aquel, quiero esto, quiero lo otro». Era una declaración de intenciones en todas regla. Y eso, es lo que consigue (ya en la vida real) la diseñadora Olympia Le-Tan con sus creaciones.
Olympia Le-Tan (Londres, 1977) es una de las diseñadoras más originales y auténticas de los últimos tiempos. Principalmente, porque como Picasso o Dalí, cuando ves una prenda o un accesorio suyo, identificas rápidamente su sello. Pocos artistas consiguen esto de una forma tan sofisticada y atractiva.
Empezó con Gilles Dufour en Chanel y luego en Balmain para pronto iniciar un imparable camino en solitario que nos hace soñar. Dj en su época Boîtes de nuit, la reina del Do it yourself, colaboraciones en el cine con Spike Jonze y Wes Anderson (¡ni más, ni menos!), la personalidad de Olympia se refleja en todo lo que hace y, cómo no, en sus bolsos.
Le enseñó a coser su abuela y con 18 hizo el primero (del que hoy se avergüenza) para su madre. Desde entonces sus aficiones, entre las que destaca leer, se han plasmado en estos bolsos de mano que llevan todas las famosas. Buenos días tristeza, Drácula, Lolita, Moby Dick, Madame Bovary… Cualquier creación suya es irresistible.
Su universo es infinito e incomparable. Se nota que creció rodeada de arte y de miles de libros. Y, como bien dice su padre, el pintor Pierre Le-Tan, «probablemente no hay mejor educación».
No puedo estar más de acuerdo.
Fuente: The story of O.L.T. Olympia Le Tan (Rizzoli, 2016)